Te hemos hablado en numerosas ocasiones de las consecuencias que el paso del tiempo y la acción de los agentes externos causa en tu rostro. En definitiva, de envejecimiento facial. Y lo hemos hecho para contarte cómo prevenirlo y, lo más importante, para compartir contigo cómo reducir sus efectos mediante diferentes tratamientos de estética que llevamos a cabo.
Pues bien, hoy no vamos a hablarte ni de arrugas de expresión, ni de manchas, ni de ojeras ni de bolsas en los ojos. Hoy te hablamos de otro signo de la edad tan sutil como determinante para que un rostro luzca más envejecido. Nos estamos refiriendo al descolgamiento del óvalo facial y hoy te contamos las señales más habituales para que reconozcas este problema y le pongas remedio lo antes posible. Toma nota y llámanos si crees que te está ocurriendo.
¿Qué entendemos por descolgamiento del óvalo facial?
La falta de tersura, elasticidad y firmeza no solo afecta a las distintas partes de tu cuerpo. También afecta a la cara cuyos músculos pierden tonificación y hacen que algunas partes de tu rostro sufran un descolgamiento. Un óvalo facial descolgado es uno de los síntomas más característicos del envejecimiento cutáneo.
Los motivos debemos encontrarlos en el paso del tiempo, en la acción de agentes como el sol o el frío o en unos falta de cuidados específicos. Pero también se debe a la reducción de la producción propia de colágeno, elastina y ácido hialurónico, algo que no deja de ser otra consecuencia de la edad, al fin y al cabo. Esto hace que el óvalo facial se descuelgue y que tengamos la sensación de que se nos “cae” el rostro.
Cómo se manifiesta ese descolgamiento.
¿Cómo comienza a hacerse evidente a los ojos este problema de envejecimiento facial? Pues estate atenta a estas señales:
- Las líneas de la mandíbula se perciben menos definidas.
- Los pómulos sufren una caída evidente que notas cuando tiras de la piel del rostro hacia la zona alta de las orejas.
- Los surcos nasogenianos están más marcados y profundos.
- Las llamadas líneas de marioneta (arrugas que van de la comisura de la boca hacia la barbilla) se agravan y se hacen más evidentes.
- Se forma más papada o se vuelve más colgante la existente.
- La cara ofrece una apariencia cada vez más cansada.
Consejos para prevenir el descolgamiento del óvalo facial.
Los indicios que alertan el descolgamiento facial y la pérdida de firmeza en el rostro afectan a cada persona de manera diferente. Y aunque no se puede evitar por completo, si sigues estos consejos conseguirás retrasar su aparición:
- Protege el rostro de la incidencia directa de los rayos UVA, así como de la luz azul de las pantallas o la radiación infrarroja. El uso de protectores específicos es fundamental para retrasar el envejecimiento facial.
- Intenta controlar el estrés y descansar de forma adecuada. El sueño es el gran aliado para el estado de tu piel y de tu salud en general.
- Realiza ejercicio de manera regular y si puedes practicarlo de vez en cuando al aire libre, mucho mejor.
- Procura hidratarte bien y beber al menos dos litros de agua al día.
- Usa cremas y productos eficaces que hidraten la piel en profundidad y la mantengan más firme y elástica.
Y obviamente, si el problema está avanzado y quieres una solución más notable y definitiva, nada como acercarte a nuestra clínicas de medicina estética en Madrid.
Analizaremos tu caso para proponerte el tratamiento más adecuado. Por ejemplo, los hilos tensores son uno de los más efectivos para luchar contra el descolgamiento del óvalo facial. Ven a vernos y te contamos más. Te esperamos en el Centro Europeo de Cirugía Estética.