Cirugía estética facial

¿Qué se consigue con una rinoplastia?

Está claro que la forma y el tamaño de la nariz es uno de los factores que más pesan en el rostro. Muchas personas no están conformes con la suya y deciden ponerse en nuestras manos para someterse a una rinoplastia. Se trata de un procedimiento quirúrgico que hay que distinguir claramente de la rinomodelación. Ahora vemos las diferencias entre ambos.

Los motivos por los que una persona puede querer someterse a una rinoplastia son varios. Puede ser la manera de solventar un problema respiratorio. En estos casos se suele optar por una septoplastia para corregir la desviación del tabique. Por supuesto, hay motivaciones sólo de naturaleza estética. En todo caso, sea cual sea la razón, el postoperatorio es muy sencillo.

En el Centro Europeo de Cirugía Estética, gracias a la rinoplastia, podemos corregir varios defectos que afectan a la nariz. Está claro que no todos los pacientes precisan del mismo tipo de cirugía. Por ejemplo, los que presentan una giba dorsal prominente, lo que se conoce como “tabique nasal arqueado”, podrán corregirla gracias a una intervención muy sencilla. Si lo que se busca es un aumento de la nariz, lo que se hace en rellenar la zona. En el caso de que el paciente tenga la punta de la nariz caída, se refuerza esa parte para que no tienda a caer. Date cuenta de que se trata de un tipo de defecto que suele sumar algunos años extras al rostro si no se corrige. En el caso de que haya que corregir una punta nasal ancha o redondeada, defecto provocado por la separación de los cartílagos, también se puede proceder con un tratamiento de rinoplastia.

Decíamos antes que hay que tener claro que una rinoplastia y una rinomodelación no son lo mismo. En el primer caso es imprescindible pasar por el quirófano. En el otro, no. La rinoplastia es un procedimiento de cirugía estética pero la rinomodelación es una técnica de modificación estética. La meta será no obstante la misma: modificar estéticamente la nariz. Si con la rinoplastia corregimos por ejemplo una posible desviación del tabique nasal, con la rinomodelación se trata de realizar pequeños implantes en la nariz para moldearla. Esta no puede utilizarse para cualquier modificación estética. Sólo se puede hacer un agrandamiento y en ningún caso una reducción. Este procedimiento tampoco sirve para modificar la parte ósea de la nariz ni para una reconstrucción nasal tras una enfermedad o un accidente. En definitiva, la rinomodelación es aplicable a un número muy inferior de casos que la rinoplastia.

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