Dicen que las arrugas son la mejor señal de haber vivido experiencias intensas en la vida. Y aunque a todos nos gusta haber vivido muchas cosas, a nadie le gusta lucir arrugas en su rostro. Hay unas en concreto que son realmente temidas por ser una evidente muestra de la edad y el paso del tiempo: las patas de gallo.
Además, dicen que si las arrugas en torno a los ojos están orientadas hacia arriba es porque esa persona ha reído mucho mientras que si están orientadas hacia abajo es porque ha llorado más de la cuenta.
En cualquier caso, las patas de gallo se han convertido en uno de los principales motivos por los que muchas pacientes se acercan a nuestro centro médico estético en Madrid para someterse a un tratamiento que las reduzca o elimine. Pero, ¿sabes por qué se producen y cómo puedes prevenirlas? Te lo contamos aquí.
¿Por qué surgen las patas de gallo?
Las patas de gallo son las arrugas que aparecen en el contorno de los ojos y se producen por la continua contracción del músculo que los rodea al abrir y cerrar los ojos.
Este tejido que rodea al ojo se llama orbicular y es sumamente fino y sensible, de ahí que el movimiento muscular para abrirlo y cerrarlo haga que se arrugue y envejezca.
Pero aunque el movimiento y las particularidades de la piel que rodea a los ojos son las principales causantes de las patas de gallo (al fin y al cabo, todo el mundo tiene arrugas de expresión alrededor de sus ojos), es cierto que el estilo de vida resulta determinante. Una exposición al sol excesiva, el consumo de tabaco, la deshidratación de la zona, entre otros, potencian su aparición. Hay que tener en cuenta que es una de las zonas de nuestro cuerpo más pobre en fibras de colágeno y elastina.
Consejos para prevenir las patas de gallo
Como adelantamos antes, el estilo de vida tiene mucho que ver en la aparición de las patas de gallo, de ahí que cuidarse y cuidar la zona en cuestión sea el primer paso para prevenir su aparición. Cuanto antes mejor, ya que en algunas ocasiones a partir de los 25 años las patas de gallo comienzan a dibujarse en el rostro. Aunque en estos casos, suele ser de una forma muy superficial.
Entre los principales consejos para prevenir, cuidar o minimizar están:
1.- Alimentación rica en antioxidantes y vitamina C.
2.- Evitar el consumo de tabaco.
3.- No excederse en el consumo de alcohol.
4.- Limitar la exposición al sol o hacerla con protección SPF 50.
5.- Usar con frecuencia gafas de sol que protejan de las radiaciones.
6.- Desmaquillarse siempre y no frotar los ojos cuando se hace.
7.- Utilizar productos específicos que hidraten y nutran la zona.
8.- Realizar deporte ya que ayuda a mejorar el estado de la dermis.
Con estos consejos, no evitarás que salgan unas arrugas de expresión que, con los años, son inevitables, pero al menos estarás retrasando y minimizando su presencia.
En cualquier caso, ya sabes que en el Centro Europeo de Cirugía Estética contamos con diferentes tratamientos faciales para reducir y eliminar las patas de gallo, como es el caso de los lifting faciales sin cirugía o los tratamientos con plasma rico en plaquetas que bioestimulación la regeneración de las células del rostro. Reserva una consulta con nosotros para que valoremos qué tratamiento te conviene más.