Quizás recuerdes un artículo en el que te explicamos qué es una rinoplastia secundaria, cuándo se realiza y cuáles son las señales que evidencian la necesidad de esta segunda intervención. ¿Cabe esta posibilidad en otro tipo de operaciones estéticas? Pues lo cierto es que sí, como puede ser el caso de la blefaroplastia secundaria de la que vamos a hablarte en este post.
Después de esta introducción, es obvio que intuyes en qué consiste esta técnica, por eso vamos a centrarnos en aquellos casos en los que es necesaria y lo que supone este nuevo paso por el quirófano para mejorar el aspecto de tu mirada. ¡Comenzamos!
Recordatorio: ¿qué es una blefaroplastia?
Por si hay algún paciente que no lo tenga claro o se le olvida este complicado nombre, te recordamos que una blefaroplastia es una intervención estética orientada a rejuvenecer y mejorar el aspecto de la mirada mediante la eliminación de la piel y la grasa que se acumula tanto en los párpados superiores como en los inferiores.
Gracias a esta técnica desaparecen esas antiestéticas bolsas y se minimizan las arrugas en esta zona del rostro tan sensible y con una piel tan fina. El resultado es muy evidente y quienes se someten a esta intervención lucen un aspecto menos cansado y envejecido.
Es importante tener en cuenta que, como te contamos en este artículo, los efectos de una blefaroplastia son definitivos, aunque no siempre se mantienen en el tiempo de la misma forma en unos pacientes que en otros. En algunos casos, dependiendo de la genética, del estilo de vida o de la edad a la que el paciente se haya sometido a esta intervención, puede experimentar un decaimiento de los párpados superiores o una nueva acumulación de grasa en los inferiores. ¿Qué hacer en estos casos? Someterse a la llamada blefaroplastia secundaria.
La posibilidad de una blefaroplastia secundaria
No hay mucho que explicarte del concepto: la blefaroplastia secundaria es una intervención quirúrgica realizada en pacientes que ya se habían sometidos previamente a una blefaroplastia y buscan una mejora adicional tras el paso del tiempo o una corrección de los resultados obtenidos en la primera intervención.
Este procedimiento se lleva a cabo en casos donde se han desarrollado problemas estéticos o funcionales tras la cirugía primaria, como exceso de piel residual, aparición de asimetrías, mala cicatrización o disfunción en el cierre ocular.
¿Cuándo suele ser necesario recurrir a ella?
Existen diversas razones por las que un paciente puede necesitar una blefaroplastia secundaria:
1.- Envejecimiento natural y progresivo de la piel: Esto provoca que el tejido en el área ocular se relaje nuevamente con el tiempo, generando signos visibles de flacidez o la nueva aparición de bolsas que comprometen el resultado de la blefaroplastia inicial.
2.- Resección excesiva de piel o grasa: Es lo que puede dar lugar a un aspecto “hundido” de los ojos que puede incluso llegar a causar dificultades para cerrar los párpados adecuadamente. En estas situaciones, la blefaroplastia secundaria busca restaurar la funcionalidad y mejorar la apariencia estética del párpado.
3.- Disfunciones oculares: En otros casos, con el paso del tiempo pueden surgir complicaciones que afectan a la funcionalidad del ojo, especialmente a la hora de abrir o cerrar los ojos, siendo este el motivo de someterse a una blefaroplastia secundaria.
¿Cómo se realiza la blefaroplastia secundaria?
La técnica de la blefaroplastia secundaria depende del área específica a tratar. Puede realizarse en el párpado superior, en el inferior, o en ambos, según la necesidad del paciente.
Por ejemplo, en una blefaroplastia secundaria del párpado superior es común que se realice una resección cuidadosa de la piel redundante que ha vuelto a aparecer o que quedó tras la primera intervención.
En el caso de una blefaroplastia secundaria del párpado inferior, la cirugía puede implicar el reajuste de grasa para corregir bolsas residuales o de nueva aparición, así como la reposición o ajuste del músculo orbicular y del septo orbitario, lo cual ayuda a mejorar el contorno y reducir cualquier signo de hundimiento.
Debido a que la blefaroplastia secundaria es un procedimiento que interviene sobre tejido cicatricial o tejido ya modificado, se trata de una cirugía que requiere de gran precisión por parte del cirujano, de ahí que debas realizarla en una clínica de cirugía plástica y reparadora con experiencia contrastada y prestigio en este tipo de intervenciones, como es nuestro caso.
La planificación detallada y el análisis exhaustivo de la estructura anatómica de los párpados del paciente son esenciales para evitar complicaciones y lograr resultados naturales. Además, es fundamental considerar factores como la calidad de la piel y el tono muscular para garantizar que se obtenga un resultado funcional y estético equilibrado. Confía para ello en un equipo experto como el del Centro Europeo de Cirugía Estética.